Adviento procede de una palabra latina que significa venida, llegada solemne. Se refiere, natuaralmente, a la venida de JESÚS a la tierra.
Podemos preguntarnos:
- ¿Qué Navidad queremos preparar?
- ¿El invitado principal llegará a ocupar el lugar que se merece en nuestro hogar, en nuestro corazón?
- ¿Dejaremos nacer el amor de DIOS en nuestras vidas?
- ¿Dejaremos que el amor comercial de los regalos reine en nuestro hogar?
Estoy seguro que DIOS VENDRÁ a tu corazón, ¡Si TÚ lo QUIERES!